Me urge una esposa para que me saque los padrastros de las uñas porque no puedo hacerlo solo. El resto del tiempo, aunque la querré muchísimo, seré frío.
Autor: Francisco Barrios
Un ejemplo de Gramática generativa
La única forma de venirse a pie es en bicicleta.
La cereza envenenada
Resulta que mi amiga R tiene una cereza de cristal de Murano como elemento decorativo en el comedor de su casa. Es preciosa la cereza, pero cuando voy a visitarla, tengo que hacer un esfuerzo extraordinario para no tragarme la fruta de vidrio. Me tienta muchísimo, pero no porque se parezca a una cereza verdadera, claro, sino porque es la fantasía de una muerte genial. Sin embargo, como sé que eso que no me mataría, sería incapaz de contar que terminé en las Urgencias de un hospital porque me tragué una cereza de vidrio. Esa sería mi muerte verdadera, pero de vergüenza. Negrapiedras. Ojalá que R nunca me regale la cereza porque tendría que tirarla a la basura.
Sobreviviente
Creo que mi padre, que ya tiene ochenta y cinco años, a veces debe mirarme y pensar de mí con alivio: “Bueno, pasó de los cincuenta. Ya no se murió”.
Geografía sonora*
Wuhan, Córdoba
Singapur, Tolima
Torrington, Nariño
* Copiado de Lydia Davis
Un destino criminal
De niño fue a un jardín infantil de mala muerte.
Un detalle policial
Por supuesto que otra parte del encanto de Clarice Lispector es su apellido, que suena a “inspector”. Y se me antoja que es así porque Clarice era una detective del alma.