Mi amiga, la más torpe de todas, la más propensa a los accidentes, se ha comprado un apartamento de dos pisos en el que las escaleras no tienen barandal. Son doce escalones.
Mi amiga, la más torpe de todas, la más propensa a los accidentes, se ha comprado un apartamento de dos pisos en el que las escaleras no tienen barandal. Son doce escalones.